Lentamente fueron brotando
tímidas gotitas de agua y sal,
saladas como el suero
que penetra tus venas
se mezcla con la sangre.
Tic, tic
cae la gotita
tic, tic
viaja ligera
a la punta del pie,
la herida de tu cadera.
Es de noche.
Estás lejos, quisiera curarte con mis manos.
Tic, tic
no para de caer
siento que desespero.
Tic, tic.
1 comentario:
Bienvenida a Cruzagramas!!! tus letras se ven muy interesantes.
Beso!
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